¿Hacia donde ven nuestros ojos?

1º Jn. 2:16 Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo.

La visión terrenal es una fuente de tentaciones. Sino veamos algunos ejemplos de la Palabra de Dios:

1) Gen. 3:6 Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría; y tomó de su fruto, y comió; y dio también a su marido, el cual comió así como ella.

Eva fue la primera persona que pecó por medio de la vista. Por ello nuestros ojos deben tener cuidado de lo que vemos hablando material y espiritualmente, pues ellos nos pueden ser motivo de caer en pecado.

2) Gen 13:10 Y alzó Lot sus ojos, y vio toda la llanura del Jordán, que toda ella era de riego, como el huerto de Jehová, como la tierra de Egipto en la dirección de Zoar, antes que destruyese Jehová a Sodoma y a Gomorra.

Abraham y Lot eran grandemente properados, pero al haber altercados entre los pastores de ambos decidieron separarse; Lot puso su mirada en la "belleza" de la tierra de Sodoma y Gomorra, sin saber que ese sería el lugar donde su desgracia más grande iba a suceder. Al poner nuestra en las cosas "buenas" de este mundo, corremos el riesgo de caer en problemas y angustias.

3) Jos 7:20-21 Y Acán respondió a Josué diciendo: Verdaderamente yo he pecado contra Jehová el Dios de Israel, y así y así he hecho. Pues vi entre los despojos un manto babilónico muy bueno, y doscientos siclos de plata, y un lingote de oro de peso de cincuenta siclos, lo cual codicié y tomé; y he aquí que está escondido bajo tierra en medio de mi tienda, y el dinero debajo de ello.

Cuando Israel conquistó Jericó, Dios habia dado la orden de que no tomaran nada de botín para ellos, puesto que eran anatemas, osea maldición caería en el pueblo de Israel. Acán no atendió al mandato Divino y tomó riquezas para sí. Eso le provocó grandes derrotas a Israel y posteriormente la muerte de Acñan y de todos los suyos con sus pertencias. El ver las riquezas lo hizo codiciarlas y tomarlas. Cuidemos nuestro ojos para no ver las cosas atractivas del mundo, pues eso producirá muerte y pérdidas irreparables, tanto materiales y peor aún, espirituales.

Si vemos las cosas de esta vida con los ojos humanos, estas podran parecer buenas y atractivas; sin embargo su final será amargo. El mirar con los ojos humanos no solo produce problemas a personales, sino que inclusive los que nos rodean sufrian las consecuencias de lo que nosotros miremos.

Recordemos también que El mismo Señor Jesucristo fue tentado por el enemigo en esta área del mirar, al mostrarle todos los reinos del mundo en el pináculo del templo (Mt. 4:1-11); sin embargo El no se dejó guiar por la vista terrenal que ha destruido a millones de hombres y mujeres a lo largo de la historia.

Todos los seres humanos somos tentados en esta área del mirar; cuando ponemos nuestros ojos en lo terrenal, vamos de pique al fracaso. Muchos caen el la pornografia, la codicia, ela lujuria, la envidia, el odio y muchos otros pecados por causa de mirar las cosas que no deben mirar.

Ahora bien, ¿hacia donde debemos mirar? Veamoslo en 4 puntos principales:

1) LA VISIÓN DOMINA LA VIDA (Gen 19:26 Entonces la mujer de Lot miró atrás, a espaldas de él, y se volvió estatua de sal.)

Cuando la mujer de Lot miró hacia atrás se detuvo en su marcha hacia la seguridad de su vida. En otras palabras, cuando miró hacia atrás, se detuvo su "progreso" y se estáncó y no pudo seguir avanzando hacia adelante.

Hoy en día, muchas personas, cristianas o no, miran demasiado hacia atras, a su pasado y ya no pueden avanzar pues su pasado los detiene. El recordar lo que yá pasó es un retroceso en nuestras vidas. Lo malo que hayamos hecho en el pasado, antes de conocer a Dios o inclusive conociéndole, ya pasó. No sigamos recriminandonos cosas que hicimos o dejamos de hacer en alguna etapa de nuestra vida, pues Cristo ya perdonó todo pecado y El ya no se acuerda de ninguno de ellos. ¿De ninguno? Sí, de ninguno. Por ello nosotros debemos nosotros también olvidar lo que nos hace daño, dejando todo hacia atrás, porque en Dios existe el "Borrón y Cuenta Nueva".

Lo que ya pasó es historia, no nos detengamos en nuestro avance hacia la Vida Eterna por cosas de nuestra vida. Si nos enfrascamos en el ayer, no podremos vivir el presente y no llegaremos jamás al futuro gloriosos que Dios tiene preparado para cada uno de nosotros.

Además, cuando vemos hacia atrás como la mujer de Lot, podemos llegar a perder muchas cosas. En el caso de ella, perdió su vida. La Biblia invita a que no Retrocedamos ni siquiera para tomar impulso. Cada día debemos avanzar, enfrente a los desafíos y prosperar en todas las áreas de nuestra vida (3Jn 1:1-4 El anciano a Gayo, el amado, a quien amo en la verdad. Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma. Pues mucho me regocijé cuando vinieron los hermanos y dieron testimonio de tu verdad, de cómo andas en la verdad. No tengo yo mayor gozo que este, el oír que mis hijos andan en la verdad.)

2) MIRAR A JESÚS SALVA LA VIDA (Num 21:9 Y Moisés hizo una serpiente de bronce, y la puso sobre una asta; y cuando alguna serpiente mordía a alguno, miraba a la serpiente de bronce, y vivía. /// Jun 3:14-15 Y como Moisés levantó la serpiente en el desierto, así es necesario que el Hijo del Hombre sea levantado, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.)

Hagamos esta comparación: La serpiente de bronce servía de cura para los israelitas que eran mordidos por serpientes venenosas en el desierto; todo el que mirara la serpiente de bronce se sanaba y vivía. Ahora, esa serpiente representaba a Cristo; cuando el hombre envenedado por la ponzoña del pecado mira a Jesús y le recibe en su vida, El sana el alma y perdona al pecador y le da nueva vida.

Nuestra vista debe estar en Cristo para nunca fracasar (Heb 12:2 puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios.)

Cuando quitamos la mirada de Dios y la ponemos en los hombres, estamos exponiéndonos a un fracaso seguro. El hombre falla; Cristo NO. Muchos se resienten con Dios por los errores de hombres. Amigo y hermano, aunque cualquiera en este mundo nos falle, Dios jamás nos fallará si nuestra mirada permanece en Jesús. Cuando miramos a Jesús, no tenemos nada que perder y si todo que ganar.

3) EL MIRAR A LAS DIFICULTADES NOS DESENFOCA DE NUESTRO OBJETIVO (Mat 14:29-30 Y él dijo: Ven. Y descendiendo Pedro de la barca, andaba sobre las aguas para ir a Jesús. Pero al ver el fuerte viento, tuvo miedo; y comenzando a hundirse, dio voces, diciendo: ¡Señor, sálvame!)

Cuando Pedro miró al viento y a las inmensas olas que se levantaba a su alrededor, comenzó a hundirse. Cuando nosotros comenzamos a ver los problemas y angustias de esta vida, y dejamos de ver a Jesús como nuestro objetivo, las dificultades fácilmente nos comenzarán a ahogar y a desesperarnos.

Entonces ¿qué debemos hacer? Hacernos los "ciegos" a los problemas, y poner nuestra confianza entera en Dios, de esa manera encontraremos una verdadera esperanza. El mirar más a las dificultades genera miedo, duda y muchas interrogantes. Las dificultades hunden al hombre.

El mirar a personas en los parques y calles públicas a los ojos podemos notar depresión, angustia, decepción y desgracia. Eso se debe a que la mayoria de las personas están viendo más a los problemas que a Dios. Pero todas esas desgracias humanas son vencidas en Dios.

4) EL PONER LOS OJOS EN EL CIELO GLORIFICA A DIOS (Hch 7:55-56 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios y a Jesús que estaba a la diestra de Dios, y dijo: "Veo los cielos abiertos, y al Hijo del hombre que está a la diestra de Dios".)

El salmista ante las dificultades que estaba pasando en su vida expresó: Sal 121:1-2 "Alzaré mis ojos a los montes; ¿De dónde vendrá mi socorro? Mi socorro viene de Jehová, Que hizo los cielos y la tierra."

En los tiempos antiguos, los soldados ponian guarniciones y puestos de vigilancia en las montañas; por ello al ver las montañas, reconoce que no son los guardias los que generan su tranquilidad, sinó Dios que cuida de los suyos.

En los Cielos se encuentra Dios; el poner nuestra mirada en Dios, encontraremos una gran esperanza en nuestras dificultades, y no importa si son tan grandes como la que Esteban, el primer mártir de la Iglesia, tuvo que pasar. Si nuestra esperanza y fé están puestos en Dios, estaremos seguros.

¿Hacia donde ven nuestros ojos? Veamos a Cristo y podremos descanzar en medio de las dificultades de la vida. Amén